El amor desde el punto de vista de las Sagradas Escrituras. 3ra. Parte

Y se estableció

23 de Kislev de 5766
24 de Diciembre del 2005

Bereshit / Génesis 37:1-40:23

Rav Mijael Avila «Shlita»
Sinagogas Bet HaDerej

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Introducción

Génesis 37:1 Habitó Jacob en la tierra donde había morado su padre, en la tierra de Canaán.

Bereshit 37:1 Vayeshev Yaacov be eretz megurey abiv be eretz Kenaan.

La perasha hashavua –porción semanal- continúa hablándonos de la familia de Yaakov, tristemente en esta ocasión nos habla de uno de los errores que Yaakov cometió para con sus hijos, Yaakov amó más a su hijo Yoséf –José- hijo de su amada Rajel –Raquel- sobre los demás de sus hijos: Bereshit 37: 3 Y amaba Israel a José más que a todos sus hijos, porque lo había tenido en su vejez; y le hizo una túnica de diversos colores. 4 Y viendo sus hermanos que su padre lo amaba más que a todos sus hermanos, le aborrecían, y no podían hablarle pacíficamente.

Lamentablemente no fue el único padre de las Kitvei Hakodesh –Sagradas Escrituras- que cometió el error de preferir a un hijo sobre otro, este tema no cabe duda que merece ser tratado, no obstante, aprovecharé el amor que Yaakov le tuvo a Yosef para compartir con ustedes la tercera parte de “El amor desde el punto de vista de las Sagradas Escrituras”.

Temas de la Perasha

Primera aliá (37:1-37:11): Yaacov se estableció en la tierra de Canaán. Su hijo favorito Yosef, le reporta información crítica sobre sus hermanos, Yaacov le fabrica a Yosef una túnica de colores. Yosef irrita a sus hermanos al contarles sus sueños proféticos, Yosef sueña que todas las gavillas de trigo se inclinan a su gavilla, y que el sol y la luna le hacen reverencias, estos sueños significan que su familia le reconocerá como Rey.

Segunda aliá (37:12-37:22) Los hermanos de Yosef apacientan las ovejas de su padre en Siquem. Yaacov manda a Yosef a ver como están sus hermanos y cómo están las ovejas, Yosef los encuentra, un hombre lo halla errante por el campo y le informa que sus hermanos se fueron a Dotán. Cuando lo ven llegar sus hermanos conspiran contra él para matarlo. Rubén los persuade y les aconseja que mejor lo hechen a un pozo en vez de matarle.

Tercera aliá (37:23-37:36) Yehuda convence a los hermanos de sacarlo del pozo y de venderlo a una caravana de Ismaelitas que estaba pasando por el lugar en ese momento. Cuando Rubén vuelve y encuentra el pozo vacío, se rasga las vestiduras. Los hermanos remojan la túnica de Yosef en la sangre de un cabrito y se la enseñan a su padre Yaacov, quien cree que su hijo ha sido devorado por animales salvajes. Yaacov queda totalmente desconsolado. Mientras tanto, los ismaelitas venden a Yosef como esclavo a Potifar, el jefe de carniceros del Faraón.

Cuarta aliá (38:1-38:38:30) Aconteció que Yehuda se aparto de sus hermanos y vio allí a la hija de un adulamita la cual se llamaba Súa, y ella le concibió, y dio a luz a un hijo llamado Er. Después Yehuda toma mujer para su primogénito la cual se llamaba Tamar, y Er fue malo ante los ojos del Eterno y le quitó la vida. Yehuda le pide a Onán hermano de Er, que se despose con Tamar y también el muere en circunstancias parecidas a las de su hermano. Tamar es mandada a casa de su padre hasta que crezca Sela hijo de Yehuda. Cuando la esposa de Yehuda muere, Tamar decide tener hijos a través de él. Tamar da a luz gemelos.

Quinta aliá (39:1-39:6) Aunque Yosef fue vendido como esclavo y llevado a casa de Faraón, el Eterno estaba con Yosef, y fue varón prospero, Yosef halló gracia ante los ojos del egipcio; y el hizo mayordomo de su casa y entregó en su poder todo lo que tenía. Y era Yosef de hermoso semblante y bella presencia.

Sexta aliá (39:7-39:23) La mujer de Potifar se siente atraída por la belleza física de Yosef, y al no ser correspondida acusa falsamente a Yosef de intento de seducción y Potifar lo echa a la cárcel. Pero el Eterno estaba con Yosef y le extendió su misericordia y le dio gracia en los ojos del jefe de la cárcel, y el jefe de la cárcel le entrega a Yosef el cuidado de los presos y de todo lo que se hacia allí.

Séptima aliá (40:1-40:19) En la prisión, Yosef predice con éxito los sueños de dos de los sirvientes de Faraón que estaban arrestados en la prisión. Al copero le predice que va a volver a palacio, y al panadero le predice que le van a colgar, Yosef le pide al copero que se acuerde de él y haga mención de él ante Faraón, y le pide que lo saque de esa casa.

Enseñanza

Para aquellos que no han leído las primeras dos partes del tema que titule “El amor desde el punto de vista de las Sagradas Escrituras” las podrán encontrar en las dos perashot anteriores de este año 5766 que se titulan: “Vayetze” y “Vayishlaj”.

Quisiera comenzar en esta tercera parte hablando del amor en el matrimonio, lo quería dejar para el final, sin embargo creo que es importante que se tome en estos tiempos de tanta necesidad, por lo que permítanme comenzar con algunas reflexiones: En una empresa, en un equipo de fútbol, en una escuela, etc, cualquiera que sea el ámbito en donde se desempeñe, las personas realizan un papel, un puesto, unas tareas, y el matrimonio no es la excepción, el matrimonio exige que para realizarlo de la mejor manera, cada uno de los cónyuges conozca primeramente que tienen cada uno un rol que ejercer, dicho rol no se debe anteponer al rol que desempeñará su compañero, sino que debe ser complementario, e incluso, deben tomar conciencia que uno y otro deberán conocer las tareas de el otro, por cuanto en ocasiones se verán forzados a suplir a su cónyuge.

No sé que tan concientes estén ustedes al respecto de la falta de capacitación en cuanto al matrimonio se refiere, miren, en el matrimonio, cada uno de los cónyuges desempeñará un papel, dicho papel lo ejercitará varias horas al día, y no obstante de la exigencia que tendrá su papel, es increíble pero la preparación es casi nula, si nosotros reflexionamos en el tiempo que le dedicamos a estudiar una profesión para ejercerla, o bien, el tiempo que se destinaría para aprender algún oficio, nos daríamos cuenta que son años, lo que se usa para ejercer algún trabajo, y ya no digamos un puesto directivo, el cual, seguramente tendrá que ver con la experiencia laboral acumulada a lo largo de los años además del conocimiento profesional, y si para dichos trabajos sí nos preparamos, ¿por qué no le invertimos años a prepararnos al matrimonio? Lo único que se hace, es tomar experiencia de los matrimonios que se conocen, es decir, de los padres; abuelos; conocidos; aunque, no con la debida atención que se merecería, en algunos casos se asiste a pláticas matrimoniales las cuales serán de provecho, aunque desde luego no suficientes. ¿Cuántos libros de matrimonio haz leído? Si me dices que uno o ninguno, es parte de las evidencias que demuestran el poco interés que se tiene para algo que debería ser importantísimo en nuestras vida pero que lamentablemente no le tomamos el valor debido.

Aquellos que estén interesados en casarse, deberán conocer el concepto que las Kitvei Hakodesh nos dan al respecto del amor así como del matrimonio, y todo lo que conlleva, ahora esa es la teoría, por lo que es importante que se complemente observando a matrimonios exitosos que hayan triunfado llevando a la practica lo anterior, yo siempre he dicho, sabré que triunfé como esposo cuando mis propios hijos deseen tener un matrimonio como el nuestro, y si algunos de mis hijos, ni aún en el matrimonio de sus padres pudieran tomar ejemplo, el fracaso en esa materia sería evidente.

En una conferencia previa que impartí en la sinagoga Bet Haderej, les platiqué que en mi propia experiencia de casado, viví un común denominador con todos aquellos que se casan, y fue el hecho de experimentar los sentimientos y la pasión en su máxima expresión, pero definitivamente llegó el momento en que la intensidad bajo, y tal cual lo he comentado en los dos primeros estudios anteriores, ello me llevo a preguntarme si en verdad seguía amando a mi esposa, dado que los sentimientos no se disfrutaban como al principio, me empecé a preguntar ¿por qué? en aquel entonces lo primero que comprendí fue que a la etapa preliminar de una relación le denominaban en su mayoría “la etapa de enamoramiento”, dicha etapa, la ciencia habla de ella y dicen que en ella todo comienza con la atracción que sentimos por una persona en especial, que no sólo nos agrada físicamente, sino que tiene algo que lo convierte en el blanco de nuestra atención; para entonces nos hemos convertido en víctimas de las feromonas, sustancias volátiles aromáticas propias de cada persona que provocan reacciones de atracción en el sexo opuesto y son percibidas inconscientemente a diferencia de otros aromas como el de los perfumes, lociones y cremas. La feromonas se encuentran principalmente en la zona de las axilas y los genitales. Una vez que se inicia la relación comenzamos a sentir la imperiosa necesidad de estar con el otro y su sola presencia nos causa emoción y alegría, lo que produce un proceso bioquímico que se inicia en la corteza cerebral pasa al sistema endocrino y se transforma en respuestas fisiológicas como la secreción de fluidos, olores, dilatación y erección. En la etapa de enamoramiento donde lo que predomina son las reacciones de excitación y deseo en lugar de la razón. La causante es la feniletilamina que a su vez desencadena la producción de dopamina o norepidefrina, es decir, anfetaminas cerebrales que producen esa sensación de desasosiego. Sin embargo el mismo cerebro para restaurar los síntomas de este dopaje segrega endorfinas y encefalinas que permiten una sensación de paz, calma y seguridad. En la etapa llamada de enamoramiento, no sólo se quiere pasión, también surge la necesidad de fomentar una relación de vinculación y afecto con la pareja originado por la acción de la Oxitocina, una hormona que provoca la necesidad de crear lazos permanentes entre los amantes, y las madres con los hijos. Ésta se produce tras un trabajo de parto o la sensación de un orgasmo, desencadenando cambios en las conexiones nerviosas de los miles de millones de circuitos cerebrales, es como un interruptor central que provoca nuevos patrones de interacción entre las células. Dicha etapa adicionalmente, es regulada por la producción de serotonina y melatonina, sustancias antidepresivas que provocan sensaciones de nerviosismo, alegría y felicidad. Actúan incrementando la actividad sexual, cardiovascular y digestiva, y desde luego, se incluye la presencia de la adrenalina que es segregada por las glándulas suprarrenales.

El anterior proceso bioquímico resulta excitante y adictivo, tanto que desearíamos que nunca terminase, sin embargo el llamado enamoramiento solo puede tener un lapso de 18 a 30 meses de duración, tras lo cual el organismo comienza a hacerse resistente a este bombardeo de sustancias químicas, que aunque se encuentran presentes comúnmente en el organismo, sólo durante la etapa de enamoramiento trabajan en conjunto. Se dice que este cocktail del enamoramiento permanece durante el tiempo necesario para que la pareja se conozca, se relacione y tenga hijos.

Todo lo anterior nos puede ayudar a comprender que el ser humano, asocia el bienestar que fluye en su cuerpo en la etapa denominada del enamoramiento, y lo confunde con el amor, siendo hasta cierto punto normal dado que es cuando la “aparente” felicidad se vive al máximo, cuando dicho periodo se acaba, se corre el riesgo de que si el acoplamiento en la pareja se da con dificultades de carácter entre los cónyuges, o bien problemáticas propias del matrimonio y que pueden se diversas índoles, los pueden llevar al fracaso matrimonial y desde luego al divorcio.

¿EXISTE EL AMOR ETERNO?
Retomemos el concepto que nos da el diccionario del amor con el objeto de seguir entendiendo lo anterior: Amor. 1. Sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser. || 2. Sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear. || 3. Sentimiento de afecto, inclinación y entrega a alguien o algo.

En el primer estudio plantee el hecho de que al asociar el amor a los sentimientos (tal cual lo vemos en el diccionario), le imposibilita éxito perdurable, dado que es imposible que cualquier sentimiento dure permanentemente, la felicidad, la tristeza, la melancolía, etc. demuestran que es imposible conservarlas permanentemente, a no ser que existan trastornos psicológicos o físicos que merezcan tratamiento, el amor no debe asociarse al sentimiento, sino que debe encontrar su sustento en la razón, veamos el concepto que he manejado después de estudiar concienzudamente los vocablos hebreos y griegos (que se encuentran en los primeros estudios) del amor: Amor: es una elección mental basada en la razón, de dar a través de actos a la persona receptora de nuestro amor, cuidado, atención, afecto, cariño, obediencia y sobre todo protección, es complacer a la persona amada, antes a que nosotros, a través de sus gustos y preferencias; el amor surge a partir de la identificación de aspectos admirables en la persona amada.

Como ustedes se habrán percatado, el sentimiento no forma parte de mi concepto de lo que es el amor, y con ello no quiero decir que no pueda estar presente, ya que los sentimientos que puedan llegar acompañar al amor, es el sazón de éste, pero, no es parte fundamental, para entenderlo he puesto como ejemplo al odio, ya que las Kitvei Hakodesh nos enseñan que es lo opuesto al amor, por lo que el odio al igual amor no es un sentimiento (como también se enseña), ¿cómo lo demuestro? Sencillo, resulta imposible odiar a alguien sin tener fundamento para que exista el odio hacia alguien, se requiere razones o motivos que le den a la persona que odia, el justificante para manifestar aversión hacia alguien, el amor así mismo, requiere razones intelectuales que lo hagan sostenerse, necesita evidencias palpables que hagan que la persona destinataria de nuestro amor, se haga merecedor de él.

Cuando las personas cree que el amor es sentimiento, al menguar las sensaciones o emociones propias de éste, la razón les dirá que se acabó, y por lo tanto irán en pos de otros “amores” que le provoquen las sensaciones y los sentimientos perdidos, haciéndolos adictos a ellos, y por lo tanto susceptibles a casarse y divorciarse, casarse y divorciarse, si al menos supieran que el amor se basa en la razón, podrían tener esperanza de preservar su relación. Leamos basándonos en lo anterior, el siguiente pasuk que nos habla del amor: Eclesiastés 9:9 Goza de la vida con la mujer que amas, todos los días de la vida de tu vanidad que te son dados debajo del sol, todos los días de tu vanidad; porque esta es tu parte en la vida, y en tu trabajo con que te afanas debajo del sol.

¿Cómo podría ser que el Eterno nos invite a gozar con la mujer que amamos toda la vida que nos es dada, si el amor no pudiera ser eterno? desde luego que el concepto del amor nos deberá cambiar para que estemos de acuerdo con el pasaje anterior, vemos otro: Cantar de los cantares 1:4 Atráeme; en pos de ti correremos. El rey me ha metido en sus cámaras; Nos gozaremos y alegraremos en ti; Nos acordaremos de tus amores más que del vino; Con razón te aman.

El amor es mejor que el vino, tal vez esto no lo entiendan los que no les gusta el vino, sin embargo los que hemos podido aprender a degustarlo, podemos tomar conciencia de lo que el amor debería poder provocarnos como consecuencia, y sobre todo si no lo estamos experimentarlo, lo busquemos con vehemencia.

Tip. He podido ver de cerca que en la etapa de enamoramiento algunos hombres se muestran egoístas con sus parejas, dado que las manifestaciones de afecto se complementan aún con lo monetario y si ni aún en esa etapa son incapaces de dar a sus “amadas” cosas, casados menos. Por lo que recomiendo a las mujeres que observen que si el hombre que les pretende no hace el esfuerzo por ganárselas con acciones, definitivamente no es una persona que les convenga.

¿Quieren ver un ejemplo Escritural del enamoramiento? Lo podemos ver con Shimshón –conocido como Sansón-, como ustedes saben Shimshón previo a su relación con Delilá –Dalila- pidió a sus padres que le apoyaran para pedir la mano de una mujer pilishtim –filistea-, leámoslo: Jueces 14:1 Descendió Sansón a Timnat, y vio en Timnat a una mujer de las hijas de los filisteos. 2 Y subió, y lo declaró a su padre y a su madre, diciendo: Yo he visto en Timnat una mujer de las hijas de los filisteos; os ruego que me la toméis por mujer. 3 Y su padre y su madre le dijeron: ¿No hay mujer entre las hijas de tus hermanos, ni en todo nuestro pueblo, para que vayas tú a tomar mujer de los filisteos incircuncisos? Y Sansón respondió a su padre: Tómame ésta por mujer, porque ella me agrada.

La manifestación verbal de Shimshon fue que ella le agradaba, tenía una afinidad física con ella, es decir enamoramiento, desde luego que no se puede llegar a el sin un contacto con la otra persona, lo mismo le sucedió a David con la hija de Shaúl –Saúl- leámoslo: 1 Samuel 18:20 Pero Mical la otra hija de Saúl amaba a David; y fue dicho a Saúl, y le pareció bien a sus ojos.

David al igual que Shimshón tuvieron una cercanía con su respectiva mujer, lo que provocó en ellos el sentimiento que expresaron, y lo podemos constatar con el hecho de que incluso Mical ya amaba a David, y como lo he compartido, ella tenía razones y argumentos para tal decisión.

Enfoquemos el estudio ahora al amor pero desde el punto de vista del matrimonio.

¿POR QUÉ EL MATRIMONIO?

Debemos de partir de la base, de que Hashem al habernos creado, sabe lo que es bueno para nosotros, y por lo tanto sus recomendaciones las debemos tomar en cuenta, una de ellas es justamente la razón del por qué del matrimonio, ¿cuál? leámosla: Génesis 2:18 Y dijo Hashem Eloh-m: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él.

Una de las razones fundamentales del por qué del matrimonio, es el hecho de que es bueno que el ser humano no este solo, dado que vivir y compartir con alguien de su sexo opuesto, la complementará, sus capacidades se ejercitarán y sus necesidades de pertenencia se verán cubiertas. Cuando se inicia la relación entre el hombre y la mujer, buscan cualquier pretexto para hacer las cosas juntos, desde empezar una afición por el cine, hasta ir al supermercado con el objeto de no separarse, esos lazos de unión realizando cosas en común es benéfico para el matrimonio, por lo que durante un periodo se la pasan juntos uno con el otro, transcurre el tiempo y después es común ver que con las primeras responsabilidades se pierden las actividades juntos, ya que si no es para dormir o asistir algún compromiso, difícilmente los cónyuges realizarán algo juntos, y desde ahí es como comienza la primera problemática en el matrimonio, problemática que es velada dado que se ignora que parte del motivo de la unión conyugal será el hecho de compartir tiempo juntos. Si tu eres de las personas que asistes a la sinagoga o a un lugar de reunión para aprender del Eterno junto a tu cónyuge, considera que es una bendición dado que les crea un acercamiento por cuanto tienen algo en común.

El considerar este sencillo fundamento del matrimonio nos deberá permitir replantear nuestra relación preguntándonos cosas como ¿cuánto tiempo paso con mi esposo(a)? ¿cuántas cosas hago junto a él(ella)? ¿qué debo hacer para realizar cosas juntos? Etc. Todas las interrogantes deberán estar dirigidas a buscar la compañía del ser amado, y sí piensas que el amor lo haz perdido, el realizar la voluntad del Eterno buscando la compañía de tu cónyuge te podrá dar los primeros pasos para retomar eso que haz perdido.

Eclesiastés 4:9 Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. 10 Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante. 11 También si dos durmieren juntos, se calentarán mutuamente; mas ¿cómo se calentará uno solo? 12 Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto.

Quisiera hacerles algunas preguntas con el objeto de que estén concientes de qué tan distantes están en una vida que debería ser común para los dos cónyuges.

1- Si tienes algún problema con un hijo ¿a quien se lo cuentas primero?
2- La principal distracción de tu cónyuge ¿tu la compartes?
3- Si tu cónyuge desea visitar a su familia sabiendo que eso la(o) hace feliz ¿lo acompañas?
4- ¿Haz tenido últimamente una plática profunda con tu cónyuge al respecto de los anhelos de su vida?
5- ¿Es tu esposa(o) la persona con la que mas hablas en tu familia?
6- ¿Le haz preguntado a tu cónyuge si la vida que tiene es la que esperaba?
7- ¿Haz salido en el último mes con tu cónyuge dejando a tus hijos en casa o al cuidado de alguien?
8- ¿Les es evidente a tus hijos que tu cónyuge es antes que ellos?
9- ¿Sabes que ropa le gustaría comprarse a tu esposa?
10- ¿Sabes cual afición o deporte le gustaría a tu esposo asistir o practicar?

Si las preguntas que he formulado haz respondido que no, o bien el nombre de tu cónyuge no ha sido la respuesta, debo decirte que no estas cumpliendo con el orden que el Eterno ha puesto, y por lo tanto si tu interés es mejorar tu relación conyugal, bueno sería que trataras que las respuesta de no, se convirtieran en si, y que el nombre de alguien diferente a tu cónyuge se convierta en el nombre de el o ella.

Conclusión

Según he estado preparando este estudio, creo que restarán muchos mas para complementar el tema, de hecho tenía un asunto importante que tratar aquí y era el sacar a relucir la principal problemática de la mujer casada así como la del hombre, sin embargo, el espacio se me ha acabado, por lo que les invito a que le den un seguimiento a los estudios que vendrán relacionados con el tema. En alguna próxima perasha en donde me encuentre el amor o amar, lo volveré a abordar.

Adicionalmente a que tengas la oportunidad de leer los estudios por Internet, no estaría por demás que hicieras el esfuerzo de adquirir las conferencias en audio ¿La razón? siempre hay mucha más enseñanza a través de las conferencias que se imparten, por lo que te invito a que escribas a [email protected] y las solicites, obséquialas ya que serán provechosas tanto para los matrimonio como para los que están en vías de casarse.

¡Shabbath Shalom!

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