El Temor

Yeshayaju 51:12 Yo, yo soy vuestro consolador. ¿Quién eres tú para que tengas temor del hombre, que es mortal, y del hijo de hombre, que es como heno? 13 Y ya te has olvidado de Hashem tu Hacedor, que extendió los cielos y fundó la tierra; y todo el día temiste continuamente del furor del que aflige, cuando se disponía para destruir. ¿Pero en dónde está el furor del que aflige? 14 El preso agobiado será libertado pronto; no morirá en la mazmorra, ni le faltará su pan. 15 Porque yo Hashem, que agito el mar y hago rugir sus ondas, soy tu Eloh-m, cuyo nombre es Hashem de los ejércitos. 16 Y en tu boca he puesto mis palabras, y con la sombra de mi mano te cubrí, extendiendo los cielos y echando los cimientos de la tierra, y diciendo a Sion: Pueblo mío eres tú.
17 Despierta, despierta, levántate, oh Jerusalén, que bebiste de la mano de Hashem el cáliz de su ira; porque el cáliz de aturdimiento bebiste hasta los sedimentos. 18 De todos los hijos que dio a luz, no hay quien la guíe; ni quien la tome de la mano, de todos los hijos que crió. 19 Estas dos cosas te han acontecido: asolamiento y quebrantamiento, hambre y espada. ¿Quién se dolerá de ti? ¿Quién te consolará? 20 Tus hijos desmayaron, estuvieron tendidos en las encrucijadas de todos los caminos, como antílope en la red, llenos de la indignación de Hashem, de la ira del Eloh-m tuyo. 21 Oye, pues, ahora esto, afligida, ebria, y no de vino: 22 Así dijo Hashem tu Señor, y tu Eloh-m, el cual aboga por su pueblo: He aquí he quitado de tu mano el cáliz de aturdimiento, los sedimentos del cáliz de mi ira; nunca más lo beberás. 23 Y lo pondré en mano de tus angustiadores, que dijeron a tu alma: Inclínate, y pasaremos por encima de ti. Y tú pusiste tu cuerpo como tierra, y como camino, para que pasaran.
52:1 Despierta, despierta, vístete de poder, oh Sion; vístete tu ropa hermosa, oh Jerusalén, ciudad santa; porque nunca más vendrá a ti incircunciso ni inmundo. 2 Sacúdete del polvo; levántate y siéntate, Jerusalén; suelta las ataduras de tu cuello, cautiva hija de Sion.
3 Porque así dice Hashem: De balde fuisteis vendidos; por tanto, sin dinero seréis rescatados. 4 Porque así dijo Hashem el Señor: Mi pueblo descendió a Egipto en tiempo pasado, para morar allá, y el asirio lo cautivó sin razón. 5 Y ahora ¿qué hago aquí, dice Hashem, ya que mi pueblo es llevado injustamente? Y los que en él se enseñorean, lo hacen aullar, dice Hashem, y continuamente es blasfemado mi nombre todo el día. 6 Por tanto, mi pueblo sabrá mi nombre por esta causa en aquel día; porque yo mismo que hablo, he aquí estaré presente.
7 ¡Cuán hermosos son sobre los montes los pies del que trae alegres nuevas, del que anuncia la paz, del que trae nuevas del bien, del que publica salvación, del que dice a Sion: ¡Tu Eloh-m reina! 8 ¡Voz de tus atalayas! Alzarán la voz, juntamente darán voces de júbilo; porque ojo a ojo verán que Hashem vuelve a traer a Sion. 9 Cantad alabanzas, alegraos juntamente, soledades de Jerusalén; porque Hashem ha consolado a su pueblo, a Jerusalén ha redimido. 10 Hashem desnudó su santo brazo ante los ojos de todas las naciones, y todos los confines de la tierra verán la salvación del Eloh-m nuestro.
11 Apartaos, apartaos, salid de ahí, no toquéis cosa inmunda; salid de en medio de ella; purificaos los que lleváis los utensilios de Hashem. 12 Porque no saldréis apresurados, ni iréis huyendo; porque Hashem irá delante de vosotros, y os congregará el Eloh-m de Israel.

Reflexión

Uno de los sentimientos que es habitual que se presente en el hombre es el temor, dicho temor se manifiesta acompañado de otros, como lo puede ser la incertidumbre, la desconfianza, el desamparo, etc. etc. pero es necesario saber que el temor se presenta básicamente por dos aspectos:

Temor de las circunstancias


Génesis 21:17 Y oyó Eloh-m la voz del muchacho; y el ángel de Eloh-m llamó a Agar desde el cielo, y le dijo: ¿Qué tienes, Agar? No temas; porque Eloh-m ha oído la voz del muchacho en donde está.

Temor al hombre

Génesis 26:7 Y los hombres de aquel lugar le preguntaron acerca de su mujer; y él respondió: Es mi hermana; porque tuvo miedo de decir: Es mi mujer; pensando que tal vez los hombres del lugar lo matarían por causa de Rebeca, pues ella era de hermoso aspecto.


RAZÓN POR LA QUE NO HAY QUE TEMER

Desde luego que los anteriores no son los únicos, pero de ellos se derivan muchos más. Tanto el temor a las circunstancias o al entorno, como el temor al hombre, Hashem nos muestra en Su palabra que no debemos de tenerlos, ¿la razón? es la promesa que Él estará con nosotros:
Salmos 56:4 En Eloh-m alabaré su palabra; En Eloh-m he confiado; no temeré; ¿Qué puede hacerme el hombre?
Deuteronomio 20:1 Cuando salgas a la guerra contra tus enemigos, si vieres caballos y carros, y un pueblo más grande que tú, no tengas temor de ellos, porque Hashem tu Eloh-m está contigo, el cual te sacó de tierra de Egipto.
S í¡Él esta con nosotros! y por lo tanto no tenemos que temer ¿verdad? bien, por otro lado el Eterno indica claramente en Su palabra que nosotros al único que debemos temer es a Él:
Deuteronomio 6:13 A Hashem tu Eloh-m temerás, y a él solo servirás, y por su nombre jurarás.

Génesis 26:24 Y se le apareció Hashem aquella noche, y le dijo: Yo soy el Eloh-m de Abraham tu padre; no temas, porque yo estoy contigo, y te bendeciré, y multiplicaré tu descendencia por amor de Abraham mi siervo.

Deuteronomio 3:22 No los temáis; porque Hashem vuestro Eloh-m, él es el que pelea por vosotros.

Salmos 23:4 Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo;

Salmos 118:6 Hashem está conmigo; no temeré Lo que me pueda hacer el hombre.

El temor del hombre hacia el Eterno no debe venir solo, es decir, no debe nacer tan solo por que alguien diga: “Yo le temo a Hashem así por que sí” ¡No! sino que el temor le debe nacer al hombre en la medida que conozca la voluntad de Hashem y aprenda cuales son tanto las bendiciones por seguirla como las consecuencias de no hacer Su voluntad, por ello en muchos pasajes el Eterno enlaza el guardar Su voluntad junto al tener temor a Él:
Deuteronomio 6: 24Y nos mandó Hashem que cumplamos todos estos estatutos, y que temamos a Hashem nuestro Eloh-m, para que nos vaya bien todos los días, y para que nos conserve la vida, como hasta hoy.

El solo hecho de saber que el Eterno es Justo y que por ser Sus hijos somos a los que primeros que disciplinará, ello nos debería ser suficiente para tomar conciencia de a donde el Eterno quiere llevarnos con ese temor, ahora, ese temor incluso nosotros se los debemos enseñar a nuestros hijos:
Deuteronomio 4:10 El día que estuviste delante de Hashem tu Eloh-m en Horeb, cuando Hashem me dijo: Reúneme el pueblo, para que yo les haga oír mis palabras, las cuales aprenderán, para temerme todos los días que vivieren sobre la tierra, y las enseñarán a sus hijos;

Sabiamente Hashem impone el Temor ya que sabe que será la garantía que evite que Su pueblo peque:
Exodo 20:20 Y Moisés respondió al pueblo: No temáis; porque para probaros vino Eloh-m, y para que su temor esté delante de vosotros, para que no pequéis.

COMO TRABAJA UNA AUTORIDAD

Toda autoridad debe trabajar con temor, ¿qué sucedería si supieras que no te pasará nada si te pasas un alto? o ¿qué pasaría si supieras que no hay problema con dejar de pagar tus impuestos? O ¿qué pasaría si supieras que no importa que tan tarde llegues a tu casa cuando tus padres te han dado una hora? Si te das cuenta, toda autoridad debe tener un medio para coaccionar a que se cumpla su voluntad, este medio es el temor.

Nuevamente ¿Cómo debe trabajar una autoridad? Solo con temor ¡No!, sino con una dosis de amor y protección y con otra dosis de temor, es decir, la autoridad debe trabajar por un lado con protección y cuidado hacia los que están debajo de ella y por otro con los elementos necesarios para que en caso de que se incumpla los límites marcados por la autoridad, tenga esta los medios para hacer cumplir su voluntad. Tanto en el cuidado, como en ejercer la autoridad debe existir un equilibrio, no se debe tender a excederse en ninguno, y es justamente lo difícil de sobrellevar una autoridad, como padres, como rabino, como roé, etc. Si existe el exceso de una, las personas que se encuentren debajo pueden verse afectadas, veamos lo que dice la Escritura al respecto de los padres:
Levitico 19:13 Cada uno temerá a su madre y a su padre, y mis días de reposo* guardaréis. Yo Hashem vuestro Eloh-m.

Al Eterno también le debemos temer, pero a su vez tenemos la confianza de acercarnos, de sentirnos amados por él y por otro lado sabemos que Él actuara en caso de que nos salgamos de los límites, ¿pero que sucede en el caso de algunos padres que lejos de que sus hijos les tengan temor, sus regaños o su disciplina no representa para ellos nada? Desde luego que los padres están mal, ya que los hijos deben conocer que nosotros tenemos los medios para ejercer corrección, con el objeto de que no se nos vaya de la mano la situación, por otro lado podríamos tener a algunos padres que lejos de ejercer temor sobre sus hijos, ejercen terror, eso no esta bien, el hijo no debe tenerle terror a los padres, sino temor con respeto, pero dicho temor debe ser lo suficientemente mesurado para que no se le prive a los hijos a que se acerquen a uno, o bien que tengan la confianza para presentar defensa.

¿Qué pasa en el caso de las autoridades puestas por el Eterno? lo mismo:
Deuteronomio 19:16 Cuando se levantare testigo falso contra alguno, para testificar contra él, 17 entonces los dos litigantes se presentarán delante de Hashem, y delante de los sacerdotes y de los jueces que hubiere en aquellos días. 18 Y los jueces inquirirán bien; y si aquel testigo resultare falso, y hubiere acusado falsamente a su hermano, 19 entonces haréis a él como él pensó hacer a su hermano; y quitarás el mal de en medio de ti. 20 Y los que quedaren oirán y temerán, y no volverán a hacer más una maldad semejante en medio de ti.

Para una autoridad impuesta por el Eterno es todo un reto salvaguardar la disciplina y por otro lado brindar el respaldo y cuidado necesarios, ¿qué pasa si una autoridad se excede en protección o en amor y no disciplina? la kehila –congregación- se sobrepasa, ¿qué pasa si el rabino o roé se exceden en disciplina? la congregación se cansa. Todos los que servimos al Eterno tenemos una tremenda tarea ya que no es tan fácil hacerla como a los hijos, sino por cuanto no crecieron con uno, y en otros casos ya están formados, se requiere de mucha sabiduría solventar tanto las necesidades como las problemáticas de la kehila que se van presentando.


MANDATOS EN EL QUE SE CONSIDERA EL TEMOR

En muchos de los mandatos que el Eterno nos dejó, nos recuerda el temor a Él ¿por qué? sabe que la naturaleza humana tenderá a excederse y por lo tanto Él nos recuerda que detrás de cada abuso Él estará para retribuir a cada uno su pago, veamos ejemplos:

Levitico 19:14 No maldecirás al sordo, y delante del ciego no pondrás tropiezo, sino que tendrás temor de tu Eloh-m. Yo Hashem.

Al enunciar el Eterno el temor junto a estos mandatos lo que desea es que reconozcamos que detrás de todo abuso estará Él para ejercer justicia.

Levitico 19:32 Delante de las canas te levantarás, y honrarás el rostro del anciano, y de tu Eloh-m tendrás temor. Yo Hashem.

Levitico 25:36 No tomarás de él usura ni ganancia, sino tendrás temor de tu Eloh-m, y tu hermano vivirá contigo.

Levítico 25:17 Y no engañe ninguno a su prójimo, sino temed a vuestro Eloh-m; porque yo soy Hashem vuestro Eloh-m.


RESULTADOS DEL TEMOR AL ETERNO

Es necesario que enfatice que el temor surge en la medida que conocemos al Eterno, no puede venir temor sin conocimiento, ahora bien, una vez que surge el temor en nosotros hacia Él, es como podremos experimentar las bendiciones de esto, por ejemplo el que seamos prosperado como familia::
Exodo 1:21 Y por haber las parteras temido a Eloh-m, él prosperó sus familias.
¡Shabbath Shalom!

Respuesta:
Todas las preguntas debieron evaluarse con falso, si tuviste almenos una con verdadero, tienes cosas que debes examinar en la educación hacia tus hijos.

El que nada nos faltará si le tememos:
Salmos 34:9 Temed a Hashem, vosotros sus santos, Pues nada falta a los que le temen.

Aunque parezca que aquellos que hacen maldad prolongan sus días, el Eterno nos promete que a los que le tememos nos irá siempre bien:
Eclesiastés 8:12 Aunque el pecador haga mal cien veces, y prolongue sus días, con todo yo también sé que les irá bien a los que a Eloh-m temen, los que temen ante su presencia;

Antes de finalizar espero que sea una realidad para ti el que tengas compañeros temerosos del Eterno y que guarden sus mandamientos.
Salmos 119:63 Compañero soy yo de todos los que te temen Y guardan tus mandamientos.

Tristemente no s écomo le harán aquellos que les han enseñado que los mandamientos del Eterno no son para estos tiempos y solo practican los que económicamente les convienen.

Eclesiastés 12:13 El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Eloh-m, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre.