Por Luz Pérez
En los días previos a escribir esta perasha, llego un amigo a la casa y mientras comíamos, mi esposo comento sobre un evento llamado de “sanidades” en el que participaban varios astrólogos y entre otras cosas te hablaban de tu futuro; se llevaba a cabo en una conocida plaza comercial de mi ciudad y muchísima gente asistió; entre broma y broma comentamos ¡Cuanta gente esta necesitada de saber su futuro, tener un “sueño” y que fácil es ser un charlatán e inventar cualquier cosa para enriquecerse hablando mentiras!-
Por la noche comencé a leer la perasha y ¡oh! Diosidencia (“coincidencia” que dicho sea de paso no creo exista, sino es una circunstancia puesta por Eloh-m para hacernos entender algo y por eso digo Diosidencia) me hablaba de Yaakob teniendo un sueño y una promesa del Eterno. He leído que este sueño a causado muchas interpretaciones y comentarios a través de genera- ciones de comentaristas, sabios y autores místicos.
Nuevamente confirme que el hombre anhela tener un porque, un sueño en la vida.
Así que me puse a ver lo que la Torá nos habla acerca de los sueños.
Los sueños de parte de Hashem, son profecías o figuras de lo que va a suceder a su pueblo, Bemidbar 12:6 Yoel 2:28, Hech 2:17.
Son el medio que El Eterno usa para comunicar su voluntad:
Abimelek, para que no tomara a Sarah. Bere 20:3-6
Yaakob, para prosperar en la crianza de ovejas. Berree 31:10
Labán, para que no dañara a Yaakob. Bere 31:24
Yosef, de su prosperidad futura y que sus hermanos acudirían a él. Bere 37:5-10
Copero y panadero, de su prosperidad y muerte respectivamente; siendo interpre- tados por Yosef. Bere 40:5-16
Faraón, de 7 años de abundancia y 7 de escasez. Bere 41:11-32
Sh´lomo, habla con el y Eloh-m le da sabiduría. 1 Mel 3:5
Nabucodonosor, del futuro de los reinos. Dan 2:1-3
Yosef (desposado con Miryam), de su casamiento con ella y el nacimiento de Mashiaj.
Mat 1:20
Los magos de oriente, del nacimiento de Hamashiaj. Mat 2:12
Yosef, que huya de Herodes. Mat 2:13-18
Yosef, que regrese a Eretz. Mat2:19-22
Esposa de Pilato, acerca de la importancia de Mashiaj. Mat 27:19
Los sueños necesitan una interpretación: Bere 40:5,8,9; Shof 7:15, Dan 2:2.
Turban el espiritu de la persona que los tiene: Bere 41:17; Yob 7:14; Dan 2:1,3.
Su interpretación la da Hashem: Bere 40:8,9; 41:11,25; Dan 1:17; 2:3
Puede pasar mucho tiempo en que se cumpla, pero hay que recordarlo: Bere 42:9
El entendimiento del sueño produce adoración a Hashem: Bere 28:16-17; 1 Mel 3:15; Shof 7:13
Cuando el sueño se repite es una confirmación de parte del Eterno: Bere 41:32
El Eterno también nos previene de falsos profetas soñadores de sueños:
Nos envían en pos de dioses y por tanto no debemos oírlos. Devar 13:1-4, Yirm 27:9
Hashem prueba nuestro corazón con ellos. Devar 13:4
Profetizan mentira, hacen que el pueblo se olvide de Eloh-m, El Eterno esta en contra de estos soñadores. Yirm 23:25-32
Son comparados con adivinos. Yirm 29:8, Zeja 10:2
Mancillan la carne, rechazan la autoridad y blasfeman de potestades superiores. Yehuda 8.
Reflexión.
En cuanto al sueño de nuestro patriarca Yaakob (Bere 28:10-18) en el que ángeles suben y bajan por una escalera que esta afirmada en la tierra, su extremo toca los cielos y Hashem esta sobre ella. (Pasuk 12) Podríamos decir que es la posibilidad de ascender en nuestra vida hacia El Eterno.
Si tomamos como ejemplo a Yaakob , el acababa de salir de su tierra para ir a un lugar desconocido, al igual que avinu Abraham; y dicen nuestros sabios –Maase Avot Siman le Banim- ( Los hechos de nuestros padres son señal para sus hijos)al igual que El B´rit Hadasha en 1 Co 10:6. Es así que vemos a Yaakob (Yisrael posteriormente) como el ejemplo de todo nuestro pueblo, que a través de la historia ha tenido que dejar Eretz Israel y ser exiliado, pero nunca ha perdido el sueño de vivir lo mas alto posible, cercano a nuestro Eloh-m, e incluso ayudado en esta “escalera” por ángeles ministradores.
Rabí Bunam de Pashija solía contar la siguiente historia: -Rabí Ayzik, pensaba: cuando el sueño se repite significa algo definitivamente.-
En una ocasión soñó que hacía un largo viaje a Praga, se acercaba al palacio del rey y en uno de los puentes que conducían a la entrada, se ponía a escarbar, encontraba allí un gran tesoro, y se volvía rico en gran manera.
Soñó 3 veces lo mismo, y se dijo -es verdad que los sueños son vanos, pero 3 veces el mismo-
En ese momento su situación económica era difícil y no encontraba la salida. Se pregunto -¿Acaso un simple sueño me podrá dar la solución?- -¿Será verdad?
Había mucho que perder; desde Cracovia hasta Praga era un largo viaje. Tanto tiempo lejos de casa y sin trabajar, además el dinero que tendría que invertir, solo para comprobar si el sueño era verdad o no.
Aun con todo; su situación financiera era muy difícil y decidió tomar el riesgo.
Llego a Praga se dirigió al palacio, vio el puente que ya 3 veces había soñado,-Es idéntico, empezare a cavar- dijo. Pero en el momento que camino hacia él, se dio cuenta de los guardias del palacio; (estos no aparecian en el sueño).
Desilusionado daba vueltas cerca del puente, con la esperanza de que los guardias se distrajeran o no se acercaran hacía él para poder llevar a cabo su tarea.
Sin embargo se dio cuenta de que seguramente no lo iba a lograr. Se vio a sí mismo como tonto por hacerle caso a una fantasía, además se había metido en más gastos y problemas.
Lo único que tenía en el bolsillo era la moneda con que regresaría a casa. Impote- tente se sentó frente al puente, metió la cabeza entre sus piernas pensando en el tremendo futuro que le esperaba. De pronto sintió que alguien lo sacudía.
¿Qué te pasa judío? escuchó. Era el guardia de “su puente” Rabí Ayzik no respon- dio. Se quedo paralizado de miedo.
-Cuéntame ¿qué te pasa? Te he visto varios días por aquí y parece que buscas algo- insistió el guardia.
El Rabí pensó que era mejor contarle todo y así describió sus sueños, su economía y su viaje.
Al escuchar esto, el soldado estallo en risa.
-¡Ja! ¡ja! ¡ja! Me extraña de ti judío, te ves una persona inteligente. ¿Cómo crees que va a haber un tesoro aquí solo por que lo soñaste?-
-¡Pero no fue solo 1 sueño sino 3!- dijo Rabí Ayzik.
-!Pamplinas!- exclamo el soldado – Yo también he soñado 3 veces seguidas lo mismo, soñé que en Cracovia, en tal calle, en tal casa, vive un judío llamado Ayzik y en su patio, en tal lugar tiene un tesoro.¿Tu crees que voy a viajar hasta allá solo para ver si mis sueños son verdad?-
¡Oh Eloh-m! Cracovia, Ayzik, esa calle…¿Será posible? Rabí Ayzik no dijo nada, le dio las gracias al guardia y se fue tan rápido como pudo.
Cuando llego a casa, excavo en el lugar que el guardia había descrito y frente a sus ojos apareció un gran tesoro.
Se dio cuenta que tuvo que ir hasta Praga, no para encontrar el tesoro, sino para darse cuenta de que lo tenía en su propia casa.
Conclusión
Así que en la “escalera” de la vida debemos caminar con los pies bien puestos en la tierra y nuestros ojos en los cielos, deseando alcanzar nuestra máxima comunión con Avinú; pero jamás olvidemos que nuestros sueños pueden estar mas cerca de lo que creemos. Devar. 30:14
¡¡SHABAT SHALOM!!
