«Lev&aacutentate y anda»

En este Shabat, hemos tenido el privilegio de dar lectura a la última perashah –porción- del sefer Vaikra –libro de Levítico-, la cual lleva por nombre Bejukotai, y que traducen comúnmente como «En Mis estatutos». Donde encontramos las consecuencias de la obediencia y desobediencia, por decirlo de alguna manera.

La primera recomendación que encontramos en esta perashah es halak –caminar, andar- en los jukim –estatutos-; shamar –guardar- los mitzvot –preceptos- y ‘asah –hacer-.

Vaikra (Lev) 26:3 «Si andáis según mis estatutos y guardáis mis mandamientos, poniéndolos por obra / Im bejuqotai teleju v’et mitzvot, tishm’ru va’asitem otam.

Inmediatamente a esto, se menciona la bendición que Elokim derramará sobre nosotros, en caso de que así suceda.

Dado que en esta perashah, en un principio, se mencionan los estatutos y preceptos, quiero compartir primeramente con ustedes, un panorama muy general, de lo que son estos. Y repito, muy general.
Quiero adelantar que estas referencias, me ayudarán en la aclaración de una palabra que expondré en este estudio, la cual en hebreo es “Komemiiut”.

Comencemos con el jok, singular de jukim, que según el judaísmo tradicional, tiene la siguiente definición:

Jukim: Son leyes que da El Eterno y que no tienen una justificación válida para cumplirlas, es decir el hombre no entiende su razón, pero por causa de que El Eterno las dio, se debe de cumplir.

Dos ejemplos que dan a esto son:

1) Sha’atnez: La prohibición de prendas fabricadas con lana y lino.
2) No cocinar el cabrito en la leche de su madre. O como ellos enseñan, no mezclar ningún lácteo con alguna carne.

Por otro lado, tenemos lo siguiente:

Debarim (Dt) 6:20 «En el futuro, cuando tu hijo te pregunte diciendo: ‘¿Qué significan los testimonios, las leyes y los decretos que HaShem nuestro Elokim nos mandó?’

Shmot (Ex) 18:20 Enséñales las leyes* y las instrucciones, y muéstrales el camino a seguir y lo que han de hacer. / V’hizharta ethem et hajukim v’et hatorot v’hodá’ta lehem et Haderej ielju bah v’et hama’aseh asher ia’asun.

*En este último tradujeron jukim como leyes.

¿Qué aprendemos con estos pasukim –versículos-? Si con base en la enseñanza tradicional, un jok no tiene razón de ser, el hecho de que en la Torah esté escrito, que debemos enseñar acerca de ellos, nos pone en una situación muy difícil, dado que no sabemos lo que realmente son.
Entonces, antes que nada, tenemos que saber y aprender que son los jukim para poder caminar en ellos, cumplirlos y enseñarlos.
Y si es que desean conocer qué son los estatutos, les invito a solicitar por medio del correo [email protected], la serie de conferencias, los Jukim – Estatutos, impartida por Rab Ávila shlita.

Cerrando ese paréntesis y para continuar, en cuanto a los mitzvot, seremos mucho más concretos. Dentro de la tradición de nuestro pueblo se enseña que tenemos un total de 613 mandamientos, de los cuales, 248 son positivos y 365 negativos, entendiendo la palabra negativos como lo que no se debe de hacer. Dicho en otras palabras, mitzvot ‘aseh –preceptos para hacer- y mitzvot lo ta’aseh –preceptos para no hacer-.

Teniendo ya este contexto, leamos ahora el pasuk –versículo- que nos ocupa.

Vaikra (Lv) 26:13 Yo, HaShem su Elokim que los saqué de la tierra de Mitzráim –Egipto- para que no fueran sus esclavos. Yo rompí las coyundas de su yugo, y los he hecho andar con la cabeza erguida.

Les había comentado anteriormente que la palabra que deseo estudiar el día de hoy es komemiiut, y se encuentra precisamente en este verso. Para lo que me gustaría realizar dos preguntas, la primera ¿En qué parte del pasuk creen que se encuentre el vocablo? Segunda ¿Dicha palabra les es familiar?
Para dar respuesta a la segunda, les comento que en cuanto centré mi atención en este vocablo escrito la Torah (el cual se puede calificar como un adverbio*), un recuerdo fugaz me llegó a memoria, más no podía recordarlo del todo, hasta que recurrí al Sidur –libro de rezos-, donde se encuentra lo siguiente.

(*Adverbio: Palabra invariable que modifica un verbo, a un adjetivo, a otro adverbio, o a todo un periodo; pueden indicar lugar, tiempo, modo, cantidad, afirmación, negación, duda y otros.)

Ushbor ‘ol hagoim me’al tzvarénu v’holijenu m’herah komemiiut l’artzenu. Ki El po’el i’shu’ot Atah. / Quiebra el yugo de las naciones de sobre nuestros cuellos y condúcenos prontamente con orgullo a nuestra tierra. Pues Elokim que realiza salvaciones, Eres Tú.

Esta pequeña porción, la encontramos en la parte del keriat Shma’ –recitación del Shma’-, justo después de tomar las 4 puntas de nuestro Talet –manto de oración-, es decir los tzitziot.
Y pregunto nuevamente, ¿No es similar a lo que leímos en Vaikra 26:13?

Como pudieron notar, en el hebreo también mencionamos la palabra de este estudio. Y así mismo, nos percatamos que la traducen como “con orgullo”.
Para continuar, les comparto, que mi interés aumentó cuando, según la concordancia exhaustiva Strong, esta palabra aparece una sola vez a lo largo del Tanaj; como ya sabemos, en Vaikra. Entonces ¿Qué mensaje puede darnos este vocablo?

Podríamos decir, que dado el hecho de que se mencione una sola vez, facilita en sobremanera su estudio. Ello, se los dejo a su criterio. En mi caso, esta palabra hizo trabajar mi mente de una manera que no recordaba desde mi bar mitzvah. Y no por el hecho de su complejidad, sino porque me ayudó a armar varios rompecabezas que cargaba conmigo. Y más aún, me hizo enlazar el Brit jadashah –Pacto renovado-, en este estudio. De ahí el nombre del tema.

Y para llegar a ello, continuemos con el vocablo en cuestión. Y les pido, creemos un contexto del verso a estudiar. Para ello leamos:

Vaikra (Lv) 26:3-13 «Si andan según Mis estatutos y guardan Mis mandamientos, poniéndolos por obra,
Les mandaré la lluvia a su tiempo. La tierra dará sus productos, y el árbol del campo dará su fruto.
Su trilla alcanzará hasta la vendimia, y la vendimia hasta la siembra. Comerán su pan hasta saciarse y habitarán seguros en su tierra.
Daré paz en la tierra; dormirán, y no habrá quien los espante. Haré desaparecer las fieras dañinas de su tierra, y la espada no pasará por su país.
Perseguirán a sus enemigos, quienes caerán a espada delante de ustedes.
Cinco de ustedes perseguirán a cien, y cien de ustedes a diez mil; sus enemigos caerán a espada ante ustedes.
Me volveré hacia ustedes, los haré fecundos y los multiplicaré; y confirmaré Mi pacto con ustedes.
Comerán de la cosecha añeja y sólo sacarán la añeja para meter la nueva.
«Yo pondré Mi morada entre ustedes, y Mi alma no los abominará.
Andaré entre ustedes y seré su Elokim, y ustedes serán Mi pueblo.
Yo, HaShem su Elokim que los saqué de la tierra de Egipto para que no fueran sus esclavos. Yo rompí las coyundas de su yugo, y los he hecho andar con la cabeza erguida.

En estos 11 pasukim, que son la primera parte de esta perashah, encontramos un mensaje muy claro por parte de HaShem, el cual puede resumirse como: “Cumple mi voluntad y encontrarás bendición”. Y cuál es la voluntad del Eterno, sino su Torah, por lo que podemos decir también, “Cumple Torah y te llegará bendición”. ¿Qué tiene que ver esto con el vocablo komemiiut?
Como ya mencionamos anteriormente, esta palabra la encontramos en el Sidur traducida como “Con orgullo”, y en Vaikra (Lv) 26:13 la tenemos como “Con la cabeza erguida”, lo cuan suena muy similar.
Este vocablo tiene su raíz en la palabra “Kum”, la cual se puede utilizar, para denotar el levantar algo o levantarse, hablando de una manera general.

Teniendo ahora esta información, volvamos a la palabra en cuestión, Komemiiut, ¿Cómo podemos verla en esta parte de la Torah? Si entendemos que viene de la raíz kum, que es levantar, podemos decir que las traducciones que hasta ahora tenemos (con orgullo y con la cabeza erguida), denotarían la idea general de la palabra. Pues para ir con orgullo y con la cabeza erguida, tenemos que estar de pie, es decir levantados; más la condición a esto es que tenemos que encontrarnos caminando. Y en qué tenemos que caminar, sino en la voluntad del Eterno. Y para ejemplo, tenemos a Abraham abinu –nuestro padre-.

Bereshit (Gn) 13:14-17 HaShem dijo a Abram, después que Lot se había separado de él: «Alza tus ojos y mira desde el lugar donde estás, hacia el norte, el sur, el este y el oeste.
Porque toda la tierra que ves te la daré a ti y a tu descendencia, para siempre.
Yo haré que tu descendencia sea como el polvo de la tierra. Si alguien puede contar el polvo de la tierra, también tu descendencia podrá ser contada.
Levántate, anda a lo largo y a lo ancho de la tierra, porque a ti te la daré.»

En esta parte encontramos la raíz kum en la palabra levántate, y podemos apreciar claramente que va acompañada del caminar. En este caso, Elokim le hace una promesa a nuestro padre y para que esta se viera cristalizada, Abraham abinu tuvo que hacer lo propio, es decir lo que le correspondía. Y podemos decir que tenía que cumplir la voluntad de su Creador en esos momentos; lo cual como sabemos, sucedió así.

Con esta información y sumándola con la que ya contábamos, podemos dar la siguiente conclusión parcial del por qué la palabra komemiiut se encuentra en esta parte de la Torah.
Como ya vimos, para tener esta condición, se tiene que caminar en la voluntad del Ribono shel ‘olam –Creador del universo-, tal como leemos en esta perashah y en el caso de nuestro padre Abraham. Por lo que podemos decir que lo que nos hace levantarnos con orgullo, es la Torah. Y esto les pido lo tengan muy presente.
Aunado a ello, encontramos un factor intermedio en todo esto, y para clarificarla, leamos nuevamente Vaikra 26:13.

Vaikra (Lv) 26:13 Yo, HaShem su Elokim que los saqué de la tierra de Mitzráim –Egipto- para que no fueran sus esclavos. Yo rompí las coyundas de su yugo, y los he hecho andar con la cabeza erguida.

Si ya tenemos los puntos, caminar en la Torah y elevarnos o levantarnos con orgullo, que otra cosa podemos encontrar en este pasuk, sino la liberación. Que fue lo que HaShem hizo por nosotros al quitarnos el yugo que nos ataba y nos sacó de Mitzráim. Por lo que podemos decir lo siguiente:

“Al cumplir Torah te liberas y te levantas para caminar con orgullo”.

Y para terminar, los invito a ver el pasuk del Brit jadashah, que muy seguramente les vino a memoria al escuchar el nombre de este tema.

Lucas 5:17-26 Y aconteció en uno de esos días que Iehoshua’ estaba enseñando, y estaban sentados allí unos fariseos y maestros de la ley que habían venido de todas las aldeas de Galil –Galilea-, de Iehudah –Judea- y Ierushaláim. El poder del Señor estaba con él para sanar.
Y he aquí, unos hombres traían sobre una camilla a un hombre que era paralítico, y procuraban llevarlo adentro y ponerlo delante de Iehoshua’.
Al no encontrar cómo hacerlo a causa de la multitud, subieron encima de la casa y juntamente con la camilla, le bajaron por el tejado en medio, delante de Iehoshua’.
Al ver la fe de ellos, Iehoshua’ le dijo: —Hombre, tus pecados te son perdonados.
Entonces los escribas y los fariseos comenzaron a razonar diciendo: — ¿Quién es éste, que habla blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados, sino sólo Elokim?
Pero Iehoshua’, dándose cuenta de los razonamientos de ellos, respondió y les dijo: — ¿Qué razonáis en vuestros corazones?
¿Qué es más fácil? ¿Decir: «Tus pecados te son perdonados,» o decir: «Levántate y anda»?
Pero para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene autoridad en la tierra para perdonar pecados, —dijo al paralítico—: A ti te digo: ¡Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa!
De inmediato se levantó en presencia de ellos, tomó la camilla en que estaba recostado y se fue a su casa glorificando a Elokim.
El asombro se apoderó de todos, y glorificaban a Elokim. Fueron llenos de temor y decían: — ¡Hoy hemos visto maravillas!

¿Cómo empatar esto con lo que el día de hoy hemos estudiado? Para ello nos formularemos las siguientes preguntas:
¿Qué papel cumplía Rab Iehoshua’? El del Mashiaj –Mesías-.
¿Qué es lo que representa la figura del Mashiaj en esta tierra? La Torah viviente, la cual se puede cumplir de una manera práctica.
Con lo anterior podemos apreciar que la Torah viviente, Rab Iehoshua’ haMashiaj, libero a este hombre que se encontraba atrapado por un mal físico y posteriormente lo hizo caminar erguido.

Como conclusión podemos decir lo siguiente: El cumplir Torah, es lo que te ayuda a liberarte de aquello que te ata y te limita aún, y cuando te halles caminando en Torah, es decir cumplas la voluntad de HaShem, te levantarás y caminarás con orgullo.

Jazak ubaruj!

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