Provocando el cambio en ti

¡Cambios, cambios, cambios! De seguro haz escuchado que la constante es el cambio. Cambiar la forma de vida, los hábitos alimenticios, religiosos, financieros; cambiar la forma de vestir, y un sinfín de cambios para lograr resultados, mejorar la calidad de vida y ser más felíz.
Teniendo como base la Torah y la perashah de esta semana -B’shalaj-, quiero mostrarte como cambiar tus hábitos te acercará a tus metas. Hacer las cosas diferentes día a día, cristalizará tus sueños en realidades y resultados. Estos cambios impactarán no solo tu vida, sino de quien te rodea.

Sabrás qué hay detrás de la cuenta del ‘Omer, la cual año tras año se menciona como una preparación para la festividad de Matan Torah – la entrega de la Torah, o por todos conocida como Shavuot – Semanas, y cómo el Eterno busca que Su pueblo cambie de mentalidad a traves de estos eventos y ser mejores día a día.

En ocasiones un hábito te ata e impide tu felicidad, es ahí cuando puede suceder un evento traumático que cambie tu manera de pensar, tal como sucedió con el pueblo.
Todos, creo yo, le han pedido algo al Eterno. Su promesa es que serás cabeza y no cola, más sigues igual y te quejas, y en un arrebato llegas a decir que estabas mejor antes de llegar a este camino. Nuestro pueblo también lo hizo, pero muchos de ellos lograron un cambio.
Te compartiré dos formas para provocar el cambio en tus hábitos y como el Eterno utilizó ambas en el pueblo, demostrando resultados. Aunque una es más fácil que la otra.
Verás como la misma rutina del pueblo ayuda a generar un cambio, con el objetivo de ser felices, hoy en este momento.

Introducción

Las grandes empresas están acostumbradas al cambio. Tienen que estar al pendientes de qué está sucediendo en su entorno para enfocar sus esfuerzos y recursos en pos de continuar creciendo, llegar a más clientes, disminuir costos e incrementar ingresos, etc. Toda empresa de excelencia está en pos de un cambio.

Para ello, algunas empresas usan la herramienta llamada Kaizen, que habitualmente se traduce como por “cambio a mejor” o “mejora”. El kanji para esta palabra japonesa tiene un sentido más personal y ocurre en la mente para los japoneses, con una traducción más cercana a “autodesarrollo continuo”. Esta metodología japonesa que ha sido adoptada por diferentes empresas alrededor del mundo, se basa en acciones pequeñas y concretas, simples y poco onerosas. En analogía es como subir un piso usando las escaleras. Se asciende por pequeños escalones hasta alcanzar el objetivo, que es llegar al siguiente nivel de la casa.

Albert Einstein dijo, si quieres lograr resultados diferentes, debes hacer de manera diferente las cosas. Te gustaría que tu negocio aparecieran en una edición especial en una revista de distribución nacional dentro de las 500 oportunidades de negocio en el país? Te gustaria que en tu trabajo te dieran ese anhelado aumento y una posición jerárquica más al? Creo que tu respuesta es sí. Pero, ¿qué es lo que haces para lograrlo? Si te levantas a la misma hora y de la misma forma que la mayoría, si en tu lugar de trabajo haces lo mismo que los demás y así buscas un cambio, esperando que sea el Eterno quien abra el mar delante de ti, para obtener ese tan anhelado aumento de ventas, esas tan anheladas 48 horas que esperas duren tus días, porque 24 no te alcanzan, déjame decirte que no lo obtendrás.

Todos tenemos hábitos, ya sean buenos o malos. Pero, ¿qué son los hábitos? Es cualquier conducta repetida regularmente por una persona, animal o colectividad, que requiere de un pequeño o de ningún pensamiento y que es aprendida, más que haber nacido con ella. Por ejemplo: comer mucho, fumar, hacer ejercicio, planear, machismo, etc.
Si quieres provocar el cambio en ti, debes ubicar y analizar los hábitos que evitan cristalizar tus sueños y metas. Los hábitos que has aprendido ya sea de manera consciente o inconsciente.

Enseñanza

La vida de nuestro pueblo ciertamente no ha sido fácil, cada año leemos como un viaje placentero de solo tres días desde Egipto hasta el Monte Sinaí, se vuelve casi una pesadilla donde ponía su propia existencia en riesgo. ya fuera por ataques de otras naciones o por quedarse sin comida o sin agua.

Nuestro pueblo tiene la frase: Todo es para bien / Gam zu le toba, que básicamente enseña a esperar el bien de lo malo aparente. Lo mismo con la travesía del pueblo, estas “pesadillas” tenían un objetivo: eran para bien.
Shemot – Éxodo 13:17 Y luego que Faraón dejó ir al pueblo, el Eterno no los llevó por el camino de la tierra de los filisteos, que estaba cerca; porque dijo el Eterno: para que no se arrepienta el pueblo cuando vea la guerra, y se vuelva a Egipto.

El Eterno conocía la situación de su pueblo,de ahí que los hace tomar una ruta lejos de la guerra. Pero parecería que esta ruta se las dio google maps en lugar del propio Eterno, ¿no?
En Bereshit 15:21 al 18, el Eterno promete a los patriarcas que el pueblo sería tomado de tierra extraña y llevado hasta la tierra prometida.
En los versículos – pasukim que se encuentran en Bereshit – Genesis – 15:21 – 18, Shemot – Éxodo 3:15 – 18 y Shemot – Éxodo 6:5 – 8, no encuentro ninguna referencia al respecto a la estadía en el desierto, ¿tú si? Lo que sí aparece es el camino de tres días por el desierto.
Si te pones en los zapatos del pueblo, lo que esperarías es un viaje rápido y confortable.
Cuando sales de viaje esperas lo mismo, ¿no? Estar sentadito en el camion o avion, disfrutar el viaje y que tome solo el tiempo necesario, que no haya incidentes durante el mismo.

En la lectura de esta semana hay cinco diferentes eventos que le acontecen al pueblo:
1. Ataque de los egipcios y pasar por el mar rojo abierto
2. Problemas con el agua y a donde llegan hay agua amarga
3. Se queda sin comida en el desierto de Sin
4. No tiene agua para beber en Refidim
5. Es atacado por un pueblo identificado como amalekitas

Y aproximadamente seis semanas después, llegan al monte Sinaí u Horeb. El Eterno es poderoso, ¿si o no? Pudo llevarlos en un tris de Egipto a Canaán, ¿cierto? ¿Qué fue lo que sucedió entonces? ¿Por qué tantos eventos le pasan a nuestro pueblo? Se quedan sin comida, se quedan sin agua, les hacen la guerra, tienen disputas en el liderazgo, y un largo etc.
La respuesta es: si se hubiesen evitado estas vivencias, no tendrían como provocar el cambio en su mentalidad, no tendrían cómo aprender.
Bereshit – Génesis 15:18 En aquel día hizo El Eterno un pacto con Abram, diciendo: A tu descendencia daré esta tierra, desde el río de Egipto hasta el río grande, el río Eufrates.

En la mente colectiva, todos debería tener presente el objetivo del Eterno: ser luz a las naciones. Pero, ¿cómo lograrlo? Siendo ejemplo de misericordia y justicia. Seguramente haz escuchado o leído, que una característica de un buen líder es predicar con el ejemplo. Más que ordenar, un buen líder debe influir en los demás, mostrando cómo se deben de hacer las cosas. El Eterno quiere que Su pueblo sirva de modelo a las naciones en cómo conducirse con misericordia y con justicia, obedeciendo sus mandamientos, instrucciones, testimonios, etc.

Después de la redención de Egipto se reciben una serie de leyes y guías que facilitan ser este modelo de nación, como por ejemplo: tener pesas correctas, responsabilidad si alguno de tus animales lastimaba a alguien, dar su finiquito a tus trabajadores, descansar la tierra después de cierto tiempo, dejar las esquinas de los campos sin recoger para quienes tienen menos, etc. Después de recibir estas leyes y guías entrarás a la tierra prometida y las pondrás por obra.

Shemot – Éxodo 6:9 De esta manera habló Mosheh a los hijos de Israel; pero ellos no escuchaban a Mosheh a causa de la congoja de espíritu, y de la dura servidumbre.
Reza un dicho: “la burra no era arisca, los golpes la hicieron”. Algo similar le sucedió al pueblo tras vivir más de 300 años siendo esclavos, no sólo físico también mental.
Antes de que estas leyes y guías fueran entregadas, el pueblo debería prepararse. En lugar de un viaje de tres días para alabar al Eterno y recibir la Torah en el monte Sinaí, tiene diferentes experiencias que le servirán de preparación para recibirlo.

Si el pueblo no hubiera marcado sus dinteles con la sangre del sacrificio de Pesaj y solo se hubieran quedado en casa, habrían corrido la misma suerte que los egipcios.
En ingles el termino que se usa para esta festividad es Passover, es decir pasar sobre o saltarse. Si el pueblo hubiese sido digno, ¿sería necesaria este tipo de señalización? Yo creo que no. De ahí que el pueblo necesita pasar por una serie de eventos y ser libres física y espiritualmente.

Dicen que en un problema no hay mejor lugar que estar en el fondo. Estando ahí no hay hacia donde ir sino hacia arriba. El pueblo literalmente se va al fondo, física y espiritualmente, solo tienen como opción ir hacia arriba.

Shemot – Éxodo – 14:11 Y dijeron a Mosheh: ¿No había sepulcros en Egipto, que nos has sacado para que muramos en el desierto? ¿Por qué has hecho así con nosotros, que nos has sacado de Egipto?

Shemot – Éxodo 6:9 De esta manera habló Mosheh a los hijos de Israel; pero ellos no escuchaban a Mosheh a causa de la congoja de espíritu, y de la dura servidumbre.

Imagina al pueblo tras pasar más de 300 años como esclavo, ¿qué mentalidad tendrían los hijos de los hijos de los hijos, de quienes originalmente se asentaron en Egipto? El pueblo no escuchaba a Moshe Rabeinu – nuestro maestro, debido a la congoja de espíritu y a la dura servidumbre. Tenían una mentalidad y un espíritu encarcelado.

Esto Se puede ver en ti o en mí. ¿Cuántos bueno consejos has recibido, diciendo que sí los harás y terminas no haciéndolo o posponiendolo? O como hoy se dice: “Eres el hombre o la mujer del mañana”. Mañana lo reparo, mañana lo pago, mañana lo termino, mañana, mañana, mañana.

El pueblo estaba acostumbrado a ser esclavo, tenían ese hábito. Necesitaban algo para provocar el cambio. Ahora entiendes porque el pueblo veían a los egipcios como sus proveedores, salvadores y dueños. De ahí que el pueblo necesitaba cambiar su instinto físico de dependencia hacia ellos y hacerlo con absoluta conciencia espiritual hacia el Eterno. Necesitaba liberarse no solo del yugo físico de Egipto, también del mental/espiritual.
Cambiar la forma de pensar, de apreciar las cosas, los hábitos, no es algo fácil; y más cuando es algo a lo que estás tan acostumbrado. Ahora imagina cambiar la mente colectiva de un pueblo.

Existen diferentes maneras en como se puede provocar el cambio. Ejemplo:
Estar en el fondo. Sufrir una experiencia traumática que provoque el cambio, que te provoque hacer de manera diferente las cosas para lograr tu objetivo.
Modificar tus rutinas, lo que provocará un cambio en tu comportamiento.
El Eterno usa estas dos formas para provocar el cambio en Su pueblo.

Primer evento: El ejército egipcio y el mar rojo

Este se puede considerar un evento traumático. Viaja en el tiempo y sitúate al lado de Moshe Rabeinu. Si miramos al frente tienes un mar extenso sin posibilidad aparente de cruzarlo. No hay barcos que puedan ayudarte a transportar a tu familia, animales, equipaje; las joyas que le quitaste a los egipcios. Y si miras hacia atrás, viene el mejor ejército de aquel tiempo, armado hasta los dientes, no para llevarte de vuelta al trabajo, sino para aniquilarte junto con todos y todo lo que tienes.

El Eterno quiere que Su pueblo sea testigo del momento. ¿Acaso no fue suficiente todo lo que vio y vivió durante las diez plagas?
Shemot – Exodo 14:10 Y cuando Faraón se hubo acercado, los hijos de Israel alzaron sus ojos, y he aquí que los egipcios venían tras ellos; por lo que los hijos de Israel temieron en gran manera, y clamaron al Eterno. 14:11 Y dijeron a Mosheh: ¿No había sepulcros en Egipto, que nos has sacado para que muramos en el desierto? ¿Por qué has hecho así con nosotros, que nos has sacado de Egipto? 14:12 ¿No es esto lo que te hablamos en Egipto, diciendo: Déjanos servir a los egipcios? Porque mejor nos fuera servir a los egipcios, que morir nosotros en el desierto.

¡Date cuenta de la mentalidad del pueblo! ¿Te ha pasado que en algún evento adverso de tu vida, lloras al Eterno para luego volverte a Egipto?
El pueblo prefería servir a los egipcios que morir en el desierto. No acaso había salido armado de Egipto, ¿por qué les temían? Porque no había ese cambio de mentalidad en servir racionalmente al Eterno.

Shemot – Éxodo 14:13 Y Mosheh dijo al pueblo: No teman; estén firmes, y vean la salvación que El Eterno hará hoy con ustedes; porque los egipcios que hoy han visto, nunca más para siempre los verán / Vayomer Moshe el-ha’am al-tira’u hityatsvu ure’u et-yeshu’at Adonay asher-ya’aseh lajem hayom ki asher re’item et-Mitsrayim hayom lo tosifu lir’otam od ad-olam.

Parece fácil, dado que los egipcios fallecieron ahogados, nunca más los volverás a ver. Sin embargo, quiero compartirte otro punto de vista. Para ello voy a hacer uso de la transliteración del hebreo:
Vayomer Moshe el-ha’am al-tira’u hityatsvu ure’u et-yeshu’at Adonay asher-ya’aseh lajem hayom ki asher re’item et-Mitsrayim hayom lo tosifu lir’otam od ad-olam
Y Mosheh dijo al pueblo: No teman; estén firmes, y vean la salvación que El Eterno hará hoy con ustedes; porque lo que has visto de los egipcios hasta hoy, no lo volverás a ver para siempre.

Ve cómo cambia el mensaje. El pueblo tiene que dejar de pensar que es mejor servir a los egipcios que morir en el desierto, no depender instintivamente en los egipcios y pero sí racionalmente del Eterno.
El Eterno a traves de la experiencia traumática provoca el cambio de hábitos en Su pueblo. Él, Bendito Es, no está prometiendo que Su pueblo nunca más enfrentara a Egipto, o que no estará en Egipto; está ordenando no volver a mirar a Egipto para su salvación.

Reflexiona las siguientes preguntas:
¿Cuántas veces no pones tu esperanza en el Eterno? ¿Cuántas veces pensaste que es mejor servir a los egipcios que al Eterno?

Devarim – Deuteronomio 28:15 Pero acontecerá, si no escuchas la voz del Eterno tu Eloh-, para procurar cumplir todos Sus mandamientos y Sus estatutos que yo te intimo hoy, que vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te alcanzarán.
28:68 Y el Eterno te hará volver a Egipto en naves, por el camino del cual te ha dicho que nunca más volverías a ver; y allí serán vendidos a sus enemigos por esclavos y por esclavas, y no habrá quien los compre
.

Si no escuchas la voz del Eterno, te hará volver al mismo camino que tenías en Egipto, caminó que te ordenó jamás volver a seguir, ¿cuál? Depender de un ser vivo finito para tu salvación. Deja de verlos como los habías visto.
Yeshaya – Isaías 31:1 ¡Ay de los que descienden a Egipto por ayuda, y confían en caballos; y su esperanza ponen en carros, porque son muchos, y en jinetes, porque son valientes; y no miran al Santo de Israel, ni buscan al Eterno! 31:2 Pero Él también es sabio, y traerá el mal, y no retirará Sus palabras. Se levantará, pues, contra la casa de los malignos, y contra el auxilio de los que hacen iniquidad. 31:3 Y los egipcios hombres son, y no Elokim; y sus caballos carne, y no espíritu; de manera que al extender HaShem Su mano, caerá el ayudador y caerá el ayudado, y todos ellos desfallecerán a una.

Si desciendes a Egipto por ayuda, si confias en caballos, si tu esperanza la pones en carros y jinetes por ser valientes, y no miras al Santo de Israel, caerá el ayudador y caerá el ayudado.

La forma que utilizo el Eterno para provocar el cambio en el pueblo tuvo el efecto esperado. Temieron y creyeron al Eterno y a Moshe Abdo – su siervo. Tan es así que Moshe Rabeinu y el pueblo entonaron una shira, Shemot – Éxodo 15:1. Sin embargo era tal el estrés de espíritu y lo acostumbrados que estaban a Egipto como su proveedor, que necesitaban tener más experiencias para liberarse de esta atadura.

Segundo evento: Mara

El Eterno hace viajar por más de tres días al pueblo sin que encuentren una fuente de agua, y cuando lo hacen esta es amarga. ¿Te imaginas la situación? Tres días sin agua, los efectos en el cuerpo humano debido a una deshidratación son:
1- Sed
2- Boca seca o pegajosa
3- Orinar poco
4- Dolor de cabeza
5- Calambres musculares
6- Orina amarilla muy oscura o de color ámbar
7- Piel seca y arrugada
8- Irritabilidad o confusión
9- Mareos o aturdimiento
10- Latidos cardíacos rápidos
11- Respiración rápida
12- Ojos hundidos
13- Apatía
14- Flujo sanguíneo insuficiente a través del cuerpo
15- Inconsciencia o delirio

La deshidratación es una emergencia que pone la vida en peligro.Recuerda como te sientes tras un día sin beber agua en Yom Kippur y agrégale tres días caminando en el desierto. De nuevo el Eterno busca provocar el cambio haciendo uso de una terapia de shock. Estar tres días sin agua. Le enseña al pueblo que no den por sentado que tendrán agua durante el viaje, nuevamente para romper esa atadura física y mental que tenían con Egipto.

Dejame explicarte cuál era esa atadura al hablar sobre el río Nilo:
El río Nilo fue fundamental en el nacimiento de la civilización egipcia, marcó el ritmo de sus estaciones y la vida de quienes habitaban en sus orillas. Pese a estar situado en una de las zonas desérticas y áridas más extensas del planeta, Egipto acogió una de las civilizaciones más brillantes y ricas de la Antigüedad. Ello fue posible gracias al río Nilo, que desempeñó un papel crucial en la formación y desarrollo de la cultura faraónica. Fuente inagotable de recursos, el Nilo aportó con generosidad el agua y los alimentos necesarios para la subsistencia de los egipcios, y su curso constituyó la principal vía de transporte de personas y mercancías por todo el país. Con más de 6.600 kilómetros de longitud, el Nilo es el mayor río del continente africano.

En efecto, si las aguas no subían lo suficiente, se reducía la superficie de tierra donde se podía sembrar y las cosechas no crecían, con la consecuente hambruna entre la población. Una crecida excesiva también conllevaba consecuencias desastrosas, se perdían cosechas enteras por anegamiento, se destruían diques y canales, aldeas y pueblos enteros eran arrasados. La mayor parte de la sociedad en el Egipto faraónico estaba compuesta por campesinos que vivían del trabajo del campo y cuyas vidas se encontraban condicionadas por los ritmos de la inundación.

Yejezkel – Ezequiel 29:1 En el año décimo, en el mes décimo, a los doce días del mes, vino a mí palabra del Eterno, diciendo: 29:2 Hijo de hombre, pon tu rostro contra Faraón rey de Egipto, y profetiza contra él y contra todo Egipto. 29:3 Habla, y di: Así ha dicho El Eterno el Señor: He aquí yo estoy contra ti, Faraón rey de Egipto, el gran dragón que yace en medio de sus ríos, el cual dijo: Mío es el Nilo, pues yo lo hice. 29:4 Yo, pues, pondré garfios en tus quijadas, y pegaré los peces de tus ríos a tus escamas, y te sacaré de en medio de tus ríos, y todos los peces de tus ríos saldrán pegados a tus escamas. 29:5 Y te dejaré en el desierto a ti y a todos los peces de tus ríos; sobre la faz del campo caerás; no serás recogido, ni serás juntado; a las fieras de la tierra y a las aves del cielo te he dado por comida. 29:6 Y sabrán todos los moradores de Egipto que yo soy el Eterno, por cuanto fueron báculo de caña a la casa de Israel.

Los egipcios mismos consideraban al Nilo uno más de sus dioses, como un ser dador de vida. Tras los años que el propio pueblo vivió entre ellos, seguro que tenían la misma mentalidad: El rio Nilo era una fuente de vida.
Este evento muestra como el Eterno busca cambiar la dependencia física de los egipcios. Una dependencia instintiva por una racional hacia Él.

Si tú y yo vivieramos estas dos terapias de shock, ¿no sería suficiente para provocar el cambio? Dayenu, Dayenu, Dayenu, Dayenu Cambia el hábito de depender de Egipto para lograr esos sueños y metas que has pedido en lo más profundo de tu corazón al Eterno.
Mishle – Proverbios 3:18 Ella es árbol de vida a los que de ella echan mano, Y dichosos son los que la retienen.

Cada año que se danza con el Sefer en Simjat Torah, se arrojan dulces para que los demás los levanten, el fin es mostrar a niños y a adultos la dulzura de la Torah. Nuestro pueblo considera al agua una representación de la Torah misma, de ahí el contraste que vivió el pueblo, viajar tres días por desierto de Sin, llegar a un lugar donde el agua era amarga y después recibir estatutos y ordenanzas junto con agua dulce. ¡Sería la representación justa del mensaje que el Eterno quiere dar!

El pueblo recibe un reacondicionamiento para covertirse en luz a las naciones. Cuando llegan a Elim, sucede que encuentran doce fuentes y setenta palmeras, ejemplo perfecto de como espera el Eterno que funcione su pueblo. Las doce fuentes de agua bien pueden representar a las doce tribus, y las 70 palmeras a las 70 primeras naciones del mundo. Así como esas fuentes proveen de agua a las palmeras, cuando el pueblo cumpla su objetivo “escuchando atentamente la voz del Eterno nuestro Eloh-m, haciendo lo recto delante de Sus ojos y dando oído a Sus mandamientos, y guardando Sus estatutos”, predicando con el ejemplo, las demás naciones beberán de esa fuente de agua que el Eterno Es.

Tercer evento: El desierto de Sin

El pueblo parte de Elim,y llegan al desierto de Sin que está entre Elim y el monte Sinaí, a los 15 días del segundo mes después de que salieron de la tierra de Egipto:
Shemot – Éxodo 16:2 Y toda la congregación de los hijos de Israel murmuró contra Mosheh y Aharon en el desierto; 16:3 y les decían los hijos de Israel: Mejor hubiéramos muerto por mano del Eterno en la tierra de Egipto, cuando nos sentábamos a las ollas de carne, cuando comíamos pan hasta saciarnos; pues nos han sacado a este desierto para matar de hambre a toda esta multitud.

Ante todo hay un cambio, al menos ahora ya no dicen “los egipcios”, ahora ven a Egipto como la fuente de alimento; sin embargo se consideran egipcios. Su instinto, su hambre les hace recordar los “buenos viejos tiempos”. ¡Ay las ollas de carne! ¡Cuando comiamos pan hasta saciarnos! ¡Ay cuando era soltero! ¡Ay cuando era soltera! ¡Ay cuando no guardaba Shabat! ¡Ay cuando no tenía que asistir a la festividades!
Antes de llegar a este camino todo parece ser más fácil y darnos mayor felicidad. Las terapias de shock que el pueblo ha vivido aun no son suficientes para provocar el cambio de hábito, siguen de manera instintiva recurriendo hacia la vida egipcia. El Eterno tiene hacer uso de una metodología para forzar ese cambio que tanto necesita el pueblo, tú y yo.
Shemot – Éxodo 16:4 Y HaShem dijo a Mosheh: He aquí Yo les haré llover pan del cielo; y el pueblo saldrá, y recogerá diariamente la porción de un día, para que Yo lo pruebe si anda en Mi ley, o no. 16:5 Más en el sexto día prepararán para guardar el doble de lo que suelen recoger cada día.

Si quieres cambiar tus hábitos, la recomendación es realizar de 4 a 7 veces por día, durante 21 días consecutivos el nuevo hábito que deseas obtener. De la misma manera El Eterno le ordena a Su pueblo una rutina que durará 40 años, de tal manera que ya no verán a Egipto y a sus fructíferas tierras como lo máximo, sino que dependerán del Eterno.

Devarim – Deuteronomio 8:2 Y te acordarás de todo el camino por donde te ha traído HaShem tu Eloh-m estos cuarenta años en el desierto, para afligirte, para probarte, para saber lo que había en tu corazón, si habías de guardar o no Sus mandamientos. 8:3 Y te afligió, y te hizo tener hambre, y te sustentó con maná, comida que no conocías tú, ni tus padres la habían conocido, para hacerte saber que no sólo de pan vivirá el hombre, mas de todo lo que sale de la boca de HaShem vivirá el hombre.

De la boca del Eterno, salen torot- instrucciones, jukim – estatutos, mishpatim – juicios, edut – testimonios, mitzvot- mandamientos, de ahí que si escuchas atentamente Su voz y hacer lo recto ante Sus ojos, das oído a Sus mandamientos, y guardas todos Sus estatutos, tendrás comida asegurada, alcanzarás tus metas y cristalizarás tus sueños.

El Eterno provocó un cambio de rutina en Su pueblo, tenían que aprender a seguir las reglas:
Juntar solo un ‘omer, no mas, no menos
Creerle al Eterno que al día siguiente habría maná
Los que dejaban un poco para el día siguiente, por si no volvía a caer, se agusanaba.
Ya no dependían de su siembra o cosecha, ni de las lluvias o si las vacas están flacas o gordas. Todo eso sucede sí solo si escuchan Sus mandamientos y Sus instrucciones.

Cuarto evento: No tienen agua para beber

El pueblo está por llegar al monte Sinaí justo para casarse con el Eterno, y nuevamente no tiene agua para beber. El Eterno elige una ruta para provocar el cambio en ellos.

Shemot – Éxodo 3:1 Apacentando Mosheh las ovejas de Itro su suegro, sacerdote de Madián, llevó las ovejas a través del desierto, y llegó hasta Horeb, monte de Eloh-m. 3:2 Y se le apareció el Ángel del Eterno en una llama de fuego en medio de una zarza; y él miró, y vio que la zarza ardía en fuego, y la zarza no se consumía.

Devarim – Deuteronomio 5:2 HaShem nuestro Eloh-m hizo pacto con nosotros en Horeb.

¿Qué relación tienen estos pasukim con lo antes analizando? Mucha
Shemot – Éxodo 17:5 Y el Eterno dijo a Mosheh: Pasa delante del pueblo, y toma contigo de los ancianos de Israel; y toma también en tu mano tu vara con que golpeaste el río, y ve. 17:6 He aquí que Yo estaré delante de ti allí sobre la peña en Horeb; y golpearás la peña, y saldrán de ella aguas, y beberá el pueblo. Y Mosheh lo hizo así en presencia de los ancianos de Israel.

El Eterno no provee de agua al pueblo en Refidim sino en Horeb, mismo lugar donde tiempo atrás Mosheh Rabeinu tuvo una experiencia con el Eterno y donde el pueblo está casi por entrar a la tierra que fluye leche y miel. Yo creo que hubiera sido más fácil que la roca estuviera en Refidim y que el pueblo bebiera en lugar de tener que viajar a Horeb, ¿no?
Shemot – Éxodo 17:5 Y HaShem dijo a Mosheh: Pasa delante del pueblo, y toma contigo de los ancianos de Israel; y toma también en tu mano tu vara con que golpeaste continuamente el Nilo, y ve.

De nuevo se busca provocar un cambio en el pueblo, en su manera de percibir las cosas y vea el cambio en acción.
Se podría decir que el Eterno da de beber a Su pueblo en Horeb queriendo que encuentre por primera vez el monte Sinaí, su fuente de salvación física. Que sacien su sed. Al saber dónde está el agua, el pueblo irá directamente hasta el monte Sinai.

Al igual que los egipcios, el pueblo solo estiraba la mano al rio Nilo para proveerse de agua. Bebía él y sus ganados, regaba sus parcelas, hacía construcciones, etc. Ahora cambiarían su rutina. En lugar de estirar la mano, recorrerían un camino para llegar a la fuente de agua que necesitaban. Dejarían de ver al río Nilo con la mentalidad egipcia. Ya no era la creación de Par’oh, ahora el Eterno Es el dador de vida, no un río.
El Eterno debía cambiar de una vez por todas esa percepción que tenía el pueblo. En esta ocasión da el “tiro de gracia” a esa idea, hace que del monte Sinaí brote agua. Reemplaza su antigua fuente la Torah del Eterno.

La colectividad del pueblo cambiaría su esclavitud física. Ahora se preparan para Matan Torah, volviéndose su fuente espiritual. Del cielo recibieron el Mana remplazando las tierras de Egipto y ahora su fuente constante de agua se volvería el monte Sinai.

Quinto evento: La guerra con los amalekitas

Mientras el pueblo corre hacia el monte Sinaí para proveerse de agua, el pueblo de am’lek los ataca. Moshe Rabeinu ordena a Yehoshua que comande al pueblo en la batalla.
Date cuenta del cambio que en este momento. Recuerda que cuando están por cruzar el mar rojo, temen al ejército del Par’oh, en este momento están dispuestos para la batalla. Para que el pueblo no confié en su fuerza militar, Moshe Rabeinu sube junto con Aharon, Hur y su vara a la cumbre de las colinas. El acronimo de los nombres de Moshe, Yehoshuah, Aharon y Hur forman la palabra Ajim.
Shemot – Éxodo 17:11 Y sucedía que cuando alzaba Mosheh su mano, Israel prevalecía; mas cuando él bajaba su mano, prevalecía Amalec.

Otro cambio a través de un shock. El pueblo cambia la rutina. No deben bajar la mirada al estar perdiendo, deben mirar hacia arriba, hacia el cielo, hacia el lugar donde Moshe Rabeinu sostiene su vara, hacia la cumbre del monte Sinaí.

Para que el pueblo ganara la guerra, Moshe Rabeinu debía mantener en alto sus manos, provocando que mientras estuvieran peleando, el pueblo alzara sus ojos hacia lo alto, buscando el rescate del Eterno. Asi como el monte Sinaí se había vuelto en su fuente de agua, ahora se volvía en la fuente de salvación.

Conclusión

En esta charla pudiste ver cómo el Eterno buscó provocar el cambio en Su pueblo a través de cinco eventos:
1. Ataque de los egipcios y el paso por el mar rojo abierto
2. Problemas con el agua, y la que encuentran es amarga
3. Se queda sin comida
4. No tiene agua para beber
5. Ataque de los amalekitas

Usando una terapia de shock y cambio de rutinas, el pueblo rompe esa atadura física y espiritual de Egipto.
Cambiar tus hábitos trae cosas buenas a tu vida. Hacer las cosas de manera diferente te lleva a resultados diferentes en tu vida, trabajo y tu relación con el Eterno.
Cuando el Eterno hace que Su pueblo fuera testigo de cada evento, provocó un cambio en su anterior manera de vivir. Abandonando su hábitos adquiridos al estar tanto tiempo en Egipto y adquirir nuevos que les provoquen estar cerca de su Creador.
Cuando el Eterno provoca cambios de rutina es para que Su pueblo dependa de Él. No es porque haya buenas ventas en el año, o si el TLC se va a mantener, si Mexico ahora va a hacer negocios con China. El nuevo hábito deberá ser escuchar atentamente la voz del Eterno. Hacer lo correcto, escuchar Sus mandamientos y guardar Sus estatutos. De todo lo que sale de la boca del Eterno vivirá el hombre.

Realizar la cuenta del ‘Omer cada año, es una analogía a subir una escalera. Cada peldaño subido, cada día contado, debe crear conciencia de ti mismo y ver qué hábitos cambiar, para llegar a ese momento culminante de estar bajo la jupah con el Eterno. Esos 49 pequeños pasos, permiten la preparación mental y espiritual desde la festividad de Pesaj, celebrando la liberación de la esclavitud, hasta Shavuot conmemorando la entrega de la Torah.

Se conciente de ti mismo y haz una lista de aquellas cosas que no te dejan avanzar: Comer mucho, postergar, no ser organizado, ver la paja en el ojo ajeno, levantarte tarde, guardar rencor, etc. Ya que la tengas, trabaja de una en una, haz ese kaizen en tu vida.
Pide ayuda al Eterno, reconoce en qué has fallado y trabaja en pos de ver qué necesitas para provocar el cambio en ti: tomar cursos, leer un libro, pedir consejo. Sobre todo haz, y recuerda: los resultados se obtienen haciendo no hablando.

Dicen que nadie experimenta en cabeza ajena. Tú y yo sí tenemos la posibilidad. Ver lo que el pueblo vivió a lo largo de tantos años, que ello provoque el cambio en ti y ponlo en práctica, antes de que el Eterno te pruebe como se prueba la plata.

Shabat shalom!

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